Detrás de la puerta, esto

Detrás de la puerta, esto
Procuro que mi blog sea agradable como lo es un buen vino para quién sepa de cepas; como un buen tabaco para aquellos que, como Hemingway, apreciaban un buen libro, un buen vino, un buen ron y un buen puro. Es todo mi intento para cuando abra esta puerta (Foto: Fotolia.com).

Temas disponibles en este blog

sábado, 18 de septiembre de 2010

El fantasma de López en Cerro León

A Porfirio Cabrera (foto), el encargado del antiguo cuartel de Cerro León, Pirayú, ya no le sorprende los "movimientos" (fantasmas) que se hacen sentir por las noches en el lugar, como llenó de pavor a unos 200 soldados norteamericanos que en julio de 2008 estaban acampados ahí durante 17 días, armados hasta los dientes y apoyados con cuatro tanques de combate. Los marines no pudieron dormir las dos primeras noches en el ex cuartel a causa de ruidos extraños y "de un hombre vestido de negro que se les apareció a medianoche".
Es mediodia y estamos con Cabrera en el ex memorable cuartel del Mariscal Francisco Solano López. Pese a su juventud, él ya está familiarizado - dijo - de las cosas extrañas que pasa en el lugar periódicamente. Ya su padre, Benicio Cabrera, jubilado en el cargo que ahora aquel ocupa, le explicaba que no debía temer a los "poras" del lugar. "Yo, por eso, vuelvo a explicar a mi esposa y a mis hijos que viven conmigo en la casa vecina, que no teman porque esto es realidad permanente del lugar.
- ¿Qué experiencias tuvo usted?
- De vez en vez escucho que un caballo camina por el largo corredor del cuartel, vengo a ver, pero nada hay. Recorro toda la galería y nada encuentro.
-Un caballo...
- Sí, y que camina sobre el piso de ladrillo.
- ¿Escucha desde su casa?
- Desde mi casa, que está a unos 100 metros, se escucha en medio del silencio que la puerta se abre y que se golpea, fuerte, contra la pared. Se oye el sonido de maderas y piezas de hierro dando contra la tapia. Vengo a ver, pero todo está cerrado. Las hojas de cada puerta tienen tranca arriba como abajo y son muy seguras. Cuando vengo encuentro que todo está como cerré.
- ¿Y qué nos puede contar de los soldados norteamericanos y del extraño hombre?
- En el 2008 vinieron aquí unos 30 norteamericanos a limpiar el lugar, pintar las paredes, ponerlo en arreglo. A la semana siguiente llegó un contingente de 200 hombres totalmente equipados como para la guerra. Aquí se acapamentaron durante 17 días. Tenían cuatro tanques de guerra, con el cual salieron más de una vez por el centro de Pirayú a dar vueltas, invitando a los niños para pasearse con ellos.
-¿Fueron 17 noches de estar en el ex cuartel?
- Sí, se acapamentaron y pudieron estar en las piezas del ex cuartel solamente dos noches. Para la siguiente, los yanquis solicitaron sus carpas de campaña que las montaron en la intemperie y recién allí desde la tercera noche pudieron dormir liberados de extraño ruidos producidos dentro de la pieza durante las dos primeras noches. Pero el susto se dieron con el "hombre de negro".
-¿De negro?
- Un hombre que asustó a dos centinelas norteamericanos. Pasó que estos dos montaban guardia como en la parte central del ex cuartel. Mientras fumaban, se percataron que un hombre apareció en la punta del corredor y que caminó hasta la tercera habitación. Las luces estaban todas apagadas por un reglamento de ellos. El hombre, todo de negro, se quedó cerca de dicha habitación. Los guardias le preguntaron quién era y qué hacía allí. El que parecía ser un hombre, no respondió, marcó, marcial, dos pasos y desapareció de la vista de los centinelas.
-¿Después qué pasó?
- Se llenaron de pavor, estaban muy asustados. Fueron a despertarme y me contaron lo que pasó. Supongo que debe ser el espíritu del soldado que fuera fusilado por orden de López después de haber enterrado parte del oro del Estado en una de las piezas y que hasta ahora no se sacó.

Pirayú ante los ojos de una joven

Pirayú evoca el antiguo libro de lectura para el tercer grado - "Alegría" - de Concepción Leyes de Chaves, allá por la década de 1940.En este libro de texto había un página que bajo el título de "Un regalo" se menciona una carta llegada de Cerro León en la que se anunciaba que unos pirayuenses enviaría regalos por tren a unos parientes de Asunción. Los escolares de entonces, ahora en la ancianidad, quizás siempre asocien el pueblo con aquel útil material de lectura. No escapé a ese hechizo, ignorante de tiempo y espacio.
Por primera vez estuve en Pirayú. En la municipalidad una joven de 20 años, María Virginia Mareco (foto), me muestra su agenda donde tiene anotado el nombre de los personajes pirayuenses y me cuenta, entusiasmada, que ella forma parte de un grupo de jóvenes voluntarios que integran el Consejo de Recursos Hídricos encargado de atender cuatro de los 15 manatiales del pueblo. "Bueno, limpiamos los surgentes y dictamos charlas de concienciación en las escuelas y colegios. Fuimos elegidos por el Banco Mundial por lo que hacemos. Nos entregará 2.000 dólares para nuestras tareas y el dinero será administrado por "Gestión Ambiental", una ONG".
- ¿Usted sabe - me dice - que aquí nació el primer obispo de Paraguay? Se llamaba Basilio López, era el hermano de don Carlos Antonio, él vivió en la casa parroquial que está al lado de la iglesia y que ahora ocupan las carmelitas misioneras.
- ¿Y quiénes fueron otros famosos de Pirayú?
- Tengo anotado en mi agenda ... espere ... José Eduvigis Díaz, militar; Emiliano Gómez Rios, historiador; Marcelino Pérez Martínez, escritor; Roque Mereles, músico popular; Nieves Varesini de Niella, poetisa; Emilio Bodabilla Cáceres, músico; Francisco Pérez Acosta, historiador; José María Delgado, militar....
- Durante la Guerra Grande también fue herido en Pirayú y Acosta Ñu, Emilio Aceval, luego presidente de la República.
- ¡Ah!, eso yo no sabía. Aquí también está el arroyo Madama, muy visitada por Elisa Alicia Lynch. El lugar está a unos ocho kilómetros de aquí, hacia Cerro León. Es un lugar hermoso.
- Aquí veo que hay muchos arroyos.
- Son varios y el agua que tenemos es fresca y limpia, no contaminada. Nosotros tenemos agua corriente en el pueblo proveído por SENASA. El agua viene de un manantial que está a orillas del cerro.
- Y de los hoteles en Pirayú, ¿qué me puedes contar?
- No, no hay hoteles....
- ¿Y pensiones?
- Tampoco. Antes había en una conocida estancia hacia el ex cuartel de Solano López, en Cerro León, pero ahora ya no hay más.
- ¿Y los restaurantes y bares?
- Hay lugares donde los pirayuenses concurrimos, como el bar "María José", donde se sirve pollo asado, pastas helados; los jóvenes son habitués de la bodega "La Casona" y los domingos nos vamos a la heladería "Diego".
- ¿Hay universidades en el pueblo?
- No. Yo voy a la Nacional de San Lorenzo, donde estudio Biología. La mayoría de los jóvenes nos vamos todos los días a la universidad de San Lorenzo u otros pueblos cercanos. Hay micro regularmente que asegura nuestro retorno a casa, si volvemos a la noche.
- ¿Si vienen turistas, serías capaz de hacer de guía?
- Sí, claro, pero ponga que también Olga Martínez, mi compañera de oficina aquí en la Municipalidad, puede orientar a los turistas.
En la esquina de la municipalidad abordé una moto - taxi, conducida por Ricardo, un hombre de 40 años. Me lleva a Cerro León para ver lo que fuera cuartel del Mariscal Francisco Solano López. Cerca de ahí está el cementerio donde enterraron a los muertos en combate, más allá, el arroyo "Madama", visitada por la pareja de López, en carruaje, casi todos los días mientras estaban acampados en el lugar.
A la vuelta aprecié mejor, no sé por qué, las antiguas casas, la vieja estación de dos cúpulas, como ninguna de Paraguay; la plaza "General Díaz", donde hay una estatua del guerrero parado. Debía ser una estatua ecuestre, pensé. El viaje en motocicleta hasta el sitio histórico referido fue muy agradable y, sobre todo, barato. Ida y vuelta no costó sino 20.000 guaraníes, algo así como cuatro dólares.
Ir a Pirayú es un regalo de Dios, es una alegría, suficiente como para recordar el añejo libro de texto de la profesora Leyes de Chaves. En una próxima nota les hablaré de la chipa hecha en Pirayú, una delicia, porque ahora ya no tengo más espacio.