Detrás de la puerta, esto

Detrás de la puerta, esto
Procuro que mi blog sea agradable como lo es un buen vino para quién sepa de cepas; como un buen tabaco para aquellos que, como Hemingway, apreciaban un buen libro, un buen vino, un buen ron y un buen puro. Es todo mi intento para cuando abra esta puerta (Foto: Fotolia.com).

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lunes, 18 de mayo de 2009

Un presidente irresponsable

Me agradaría escribirles de muchas cosas agradables, pero dos cosillas sobre el Presidente de la República, que - advierto - son desagradables, me motivan a distraer mi tiempo, y el de ustedes.
El primero es lo de su supuesta licencia de conducir vencida y; el segundo, lo de las basuras en la casa de su hijo, Armindito.
A los que no saben diré que estuve cinco años con un Presidente de Paraguay para un sólo objetivo, procurar, junto a otros, que la imagen de ese hombre sea la mejor posible ante la opinión púbica.
En aquel empleo aprendí que las tareas se deben hacer, sí o sí, en equipo.
Vayamos a los ejemplos:
El presidente, tras decidir, por ejemplo, un viaje al interior, coordina con el que organiza el destino final. Supongamos, una inauguración en San Juan Bautista, o; la visita a un amigo, en Encarnación. Aquella, una visita oficial; esta, privada. En cualquiera de los casos, su viaje se planifica entre quién lo va a recibir en el destino final, Inteligencia Militar, la Policìa Nacional, el Secretario Privado y, en nuestro caso, el asesor de prensa.
Si el presidente viaja por avión, las Fuerzas Aéreas están involucradas en la planificación. Si, por el contrario, fuera por tierra, el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, encargado de la Policía Caminera.
Desde que el Presidente sale de Mburuvicha Roga, la seguridad entra en absoluta y coordinada acción. Desde que sale los semáforos de su hoja de ruta están en amarillo, con policías dirigiendo el tráfico en esas esquinas. En la ruta, igual, hasta que llegue a destino, imprimiendo altas velocidades al sólo efecto de la seguridad del Presidente.
Ahora voy al caso de la Policía Caminera y el reciente viaje del presidente Lugo al interior.
¿En qué cabeza cabe que la Caminera no haya estado informada del viaje presidencial?, ¿displicencia de Efraín Alegre, el ministro o; de Eduardo Petta, Director de la Caminera, o de ambos?
Se supone en un servicio de seguridad presidencial serio y coordinado que la comitiva presidencial debe desplazarse sin contratiempos, siempre por la seguridad de la vida del Ejecutivo, así como se procede en cualquier parte del mundo.
¿Qué es eso de que un agente de la Caminera detiene al Presidente y que le exige su licencia de conducir? ¿donde se ha visto semejante irresponsabilidad? ¿Y si un emboscado pegaba un bazucazo al presidente como ligó el dictador Somoza en setiembre de 1980 en una calle asuncena?
¿O la detención de la comitiva no fue sino una escena planificada?, ¿para qué?, ¿para enseñar que todos, desde ahora, somos iguales ante la ley? Me parece una torpeza grande como una casa de parte de los involucrados.
Los asesores del Presidente y el mismo Presidente han demostrado excesiva irresponsabilidad al no rechazar semejante situación de riesgo. En cualquier gobierno serio estas ideas son anuladas de cuajo.
Ahora quiero referirme a la fiesta del sábado 16 de mayo en la casa de Vivi Carrillo. Como ya todos saben el señor Fernando Lugo compró o alquiló una casa para la residencia de la mencionada mujer y del hijo de ambos, Armindo.
De nuevo los asesores metieron la pata.
Y la seguridad también.
Solo los asesores torpes pueden dejar de escribir, tan siquiera a mano en un papel para que recuerde la dueña de casa: 1)- No dejar los vehículos en la calle, porque llaman la atención, excepto que la presencia del Presidente sea oficial. 2)- No farrear a grito pelado porque los vecinos escuchan y cuentan. 3)- No deje la basura de la fiesta en el basurero de la calle, porque la prensa puede llegar a ver qué tomaron y comieron, información suficiente para hacer merecídas críticas al Presidente de los paraguayos.
Y como no asesoraron, dejaron sus vehículos en la calle, farrearon a grito pelado y pusieron los envases de las costosas botellas de bebidas importadas en el basurero de la calle, evidenciandose la escasa capacidad de guardar la imagen (incluso la seguridad) del Presidente por parte del mismo Presidente y de su equipo asesor, si así se puede llamar a los que forman su primer anillo.